Tener un acuario en casa no solo embellece el ambiente, sino que también puede ser una experiencia relajante y educativa. Sin embargo, antes de dar el paso, es importante conocer los diferentes tipos de acuarios domésticos, sus ventajas, desventajas y los cuidados que requieren.
Ideal para principiantes, este tipo de acuario es uno de los más populares por su fácil mantenimiento y gran variedad de peces coloridos.
Pensado para especies como el pez dorado (goldfish), no necesita calefacción, lo que lo hace aún más sencillo para quienes inician en este hobby.
Pros: Sin calentador, peces resistentes.
Contras: Limitada variedad de peces, mayor producción de desechos.
Tiempo de cuidado: 10–20 minutos por día/semanal.
Este acuario se centra en plantas naturales, lo que ayuda a mantener un ecosistema equilibrado. Aporta belleza natural y ayuda a oxigenar el agua.
Pros: Estético, ecológico, beneficioso para peces.
Contras: Necesita luz especial, CO₂, poda y fertilizantes.
Tiempo de cuidado: 30–60 minutos semanales.
Es el más impresionante visualmente, con corales y peces exóticos como los payasos y tangs. Sin embargo, también es el más complejo.
Pros: Increíble variedad de colores, peces y corales únicos.
Contras: Alto costo, requiere experiencia y equipos especializados.
Tiempo de cuidado: 1–2 horas por semana, más monitoreo constante.
Acuarios pequeños (menos de 40 litros), perfectos para espacios reducidos o como decoración de escritorios.
Pros: Compacto, decorativo, económico.
Contras: Cambios de agua más frecuentes, menos margen de error.
Tiempo de cuidado: 15–20 minutos cada dos días.
Principiantes: Agua dulce tropical o fría.
Intermedios: Acuarios plantados.
Avanzados: Acuarios marinos.
Espacios pequeños: Nano acuarios.
Alimenta a tus peces una o dos veces al día en pequeñas cantidades.
Cambia entre el 10% y el 25% del agua semanalmente.
Revisa temperatura, pH, y filtros con regularidad.
No sobrepobles el acuario.
Brinda iluminación adecuada según el tipo de acuario.
Tener un acuario en casa puede convertirse en una actividad relajante y enriquecedora para toda la familia, incluso para niños que aprenderán sobre responsabilidad y el cuidado de seres vivos. Solo es cuestión de elegir el tipo correcto y comprometerse con su mantenimiento.