Interior del Hogar: Es la mejor opción, ya que es más fácil controlar la temperatura y evitar problemas con cambios climáticos, luz solar directa y contaminantes.
Exteriores: tenerlo afuera requiere de buena filtración y accesorios para controlar los posibles brotes de algas y temperatura adecuada del acuario, asegúrate de que esté protegido del sol directo, la lluvia y los vientos fuertes, y considera usar un calentador o enfriador.
Evita la luz directa: exponer el acuario al sol puede causar un crecimiento excesivo de algas y fluctuaciones de temperatura.
Accesibilidad: Colócalo en un lugar donde sea fácil de darle mantenimiento y observar, lejos de áreas con mucho tránsito o donde pueda sufrir golpes que estresen los peces.
Volumen mínimo recomendado: Para principiantes, un acuario de 50-100 litros es ideal. Más grande es mejor porque es más estable en términos de parámetros de agua y más fácil de manejar que uno pequeño, sin embargo debes tener claro que peces deseas criar.
Espacio disponible: Asegúrate que tenga espacio libre donde puedas colocar los accesorios y permita revisar lo que sucede en tu ecosistema.
Especies y cantidad de peces: tu acuario será una ciudad, donde habra muchos desechos organicos, por eso no se trata solo de poner peces sin considerar los complementos como el filtrado, la grava y tipos de plantas que permita mantener el ecosistema saludable.